OTEP-A: Desconfiamos del comportamiento del Banco Mundial
Gabriel Espínola, integrante de la OTEP– Auténtica, cuestionó que instituciones del Estado hayan acordado con el Banco Mundial para diseñar el modelo de desarrollo en la que se sustentaría una nueva política pública en materia educativa.
El gremialista indicó que la falta de participación es uno de los graves problemas que debilita la democracia paraguaya.
“Confundimos la presencia con la participación. Hay que propiciar que los sujetos de las comunidades educativas participen en la línea de una nueva política pública de educación”, sostuvo.
En ese sentido, cuestionó el “apuro” por estar en el nivel de otras sociedades, con la pretensión de que organismos internacionales sean los encargados de brindar las orientaciones en nuestro país.
“Nuestros tiempos son diferentes a ese nivel. No significa renunciar a llegar a ser parte del mundo… hay que construir participación mediante foros masificados. Tenemos que continuar en perspectiva a la asunción de las nuevas políticas”, apuntó.
Reforma educativa con el Banco Mundial
“La primera medida que debe tomarse es rescindir el acuerdo con el Banco Mundial”, refirió Espínola sobre un plan de asesorías para eventualmente transformar la calidad de la educación.
Cuenta con recursos del Fondo para la Excelencia de la Educación y la Investigación (FEEI) y préstamos del Banco Mundial, con agentes que trabajan como consultores del programa.
Espínola consideró que se trata de un problema “de entrega y sometimiento”, pues a su criterio las políticas del Banco Mundial son fracasadas.
Desconfía del comportamiento del Banco Mundial.
“En ningún país donde han asesorado u otorgado recursos han sido efectivamente para el desarrollo de esas sociedades”, dijo.
“Implementan mecanismos que orientan solo hacia un sector: la competencia, considerando esto un servicio y no un derecho, restringiendo el derecho fundamental de la educación y haciendo que la educación en esencia sea parte del gran comercio”, agregó.
Aseguró que en ninguna de las cláusulas del acuerdo se menciona que el Banco pondrá una contraparte monetaria para la consultoría y añadió que dicho servicio estará exento de IVA.
Finalmente dijo que “esta lógica significa oferta y demanda, que la educación pasa a ser parte del mercado y que el Estado deja de asumir su responsabilidad de garantizar a todos sus ciudadanos a una educación digna”.