Argentina: Sonia Alesso denunció "sobrecarga laboral" de los docentes
Ante educación a distancia por coronavirus
La Secretaria General de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) Sonia Alesso, anticipó que esta semana el gremio mantendrá una reunión paritaria con el Gobierno argentino para analizar las "condiciones de trabajo" y la "sobrecarga laboral" que experimentan los y las docentes en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio que rige desde hace más de 70 días como principal medida frente a la pandemia de coronavirus.
"Todo lo que tiene que ver con el teletrabajo en el marco de la pandemia lleva muchas más horas que las que tiene un docente si estuviera trabajando de manera presencial”, advirtió la gremialista en un análisis sobre cómo la cuarentena y la suspensión de las clases presenciales en todos los niveles educativos.
Además del incremento en la carga horaria laboral que según Alesso experimentaron los y las docentes a partir del traspaso de los vínculos educativos a la virtualidad a través de plataformas digitales, la dirigente denunció que ven “con preocupación que los propios docentes están pagando la conectividad".
Pero la alarma que suena en cuanto a las condiciones laborales de los y las maestras a propósito de las medidas preventivas aplicadas para evitar la propagación de la Covid-19 no solo se ven en su rol educativo, porque la dirigente gremial explicó además en declaraciones a medios de comunicación que hay "muchísimos docentes trabajando en comedores escolares como primera línea de fuego, junto a enfermeros y médicos".
Según informó en la entrevista; Alesso llevará estos puntos a una reunión paritaria que mantendrán junto a otros gremios y el Gobierno nacional. En ese sentido, ratificó el "compromiso con las actividades (virtuales) que los maestros preparan" para los estudiantes.
El regreso de las clases presenciales y las condiciones en las que se aplicará será otro de los puntos que CTERA acercará en la reunión con las autoridades nacionales. "La educación requiere presencialidad, y eso es insustituible", destacó, aunque descartó "en cualquier hipótesis, el retorno de la primera infancia". “No se puede obligar a los niños a estar quietos: ellos se abrazan, comparten cosas y contagian mucho. Hay que elaborar protocolos específicos, es un tema complejo y queremos abordarlo bien", aseveró.
En ese marco, la dirigente reconoció que ven “con preocupación” el regreso a clases en otras partes del mundo. Como en Europa, en donde opinó que “no está resultando fácil" el regreso a la educación presencial a pesar de que la curva de contagios allí está en descenso. O en Corea del Sur, en donde “prácticamente había desaparecido la circulación, volvieron a clases y se volvieron a contagiar”. “En Francia empezaron las clases, tuvieron muchísimos problemas con los edificios escolares y tuvieron que cerrar más de 200 escuelas", mientras que en Bruselas “se hizo una encuesta en donde el 82 por ciento de los padres respondieron que no se sentían seguros de mandar a los chicos a la escuela". “Es un tema complejo”, remarcó.