Educar, no lucrar: Campaña frente al comercio y la privatización educativa

Educar, no lucrar: Campaña frente al comercio y la privatización educativa
Belo Horizonte, Brasil

En el VII Congreso Mundial de la Internacional de la Educación en 2015, Ottawa, se determinó desarrollar una estrategia de respuesta a nivel mundial para contrarrestar la influencia de actores no estatales en educación cuyas actividades ejercen un impacto negativo en la enseñanza y el aprendizaje.

La segunda presentación del 15 de noviembre estuvo a cargo de Angelo Gavrielatos, director de la Campaña Mundial. Su exposición estuvo centrada precisamente en esta estrategia de respuesta a nivel mundial frente a la privatización y el comercio educativo.

Gavrielatos inició llamando la atención sobre el volumen de lo que llaman el mercado de la educación, valorado en 2015 en 4.9 trillones de dólares y proyectado a ascender a 6.3 trillones de dólares para el 2020. Además, llamó la atención sobre el objetivo de desarrollo sostenible 4 y específicamente el punto 1 del mismo: Que todos los niños y niñas terminen una enseñanza primaria y secundaria gratuita, equitativa y de calidad.

Gavrielatos resaltó la preocupación a nivel mundial de que estos objetivos de desarrollo sostenible sean una ventana a la privatización de la educación. Y recordó que el mismo Kishore Singh, Relator especial de la ONU sobre el derecho a la educación se refirió al tema en 2016:

“Llamo a los gobiernos a abstenerse de privatizar la educación para alcanzar estos nuevos Objetivos, si la educación no es gratuita o si aumenta las inequidades sociales. La rápida expansión de proveedores privados [...] ha de reemplazarse por esfuerzos para reducir la desigualdad y ampliar la educación pública de calidad sin exclusión social”.

El siguiente punto abordado por el Director de la Campaña Mundial fue el discurso en torno a la privatización de la educación donde abundan frases como: “Una mayor autonomía escolar es beneficiosa”, “Las escuelas privadas ayudan a expandir el acceso a la educación”, “Las alianzas público-privadas tienen un mayor coste-eficiencia”. Ante Esto Gavrielatos citó directamente el Informe sobre el Desarrollo Mundial, publicado en septiembre de 2017 por el Banco Mundial, uno de los principales financiadores de la privatización:

No existe evidencia de que las escuelas privadas produzcan mejores resultados que las públicas.  La privatización de la educación acarrea numerosos riesgos, como la exclusión de los más desfavorecidos, la segregación, la explotación de las familias y el deterioro de la educación pública.

Con esto quedó clara una vez más la necesidad urgente de la campaña de respuesta mundial, misma que en América Latina lleva por nombre Educar no lucrar y ya ha sido lanzada con estudios de los procesos de privatización a nivel Latinoamericano en General y en específico en Argentina, Brasil y más recientemente en Uruguay.

El caso uruguayo es el más reciente y permite extrapolar desde ahí como debe funcionar el proceso de la campaña. Gavrielatos determina cuatro ejes principales para el lanzamiento de la campaña: Investigación, movilización, acción política y comunicación.

El director de la Campaña mundial de la Internacional de la Educación narró como en Uruguay se realizó la investigación de forma independiente por investigadores académicos, se socializó con la central única de trabajadores para informar a los demás sectores de la clase trabajadora sobre esta amenaza, se detectaron tanto los aliados como los interesados políticos en el congreso y se les presentaron los resultados de la investigación.

Finalmente, la lucha se llevó al campo mediático, tradicionalmente dominado por los poderes económicos, donde se invitó a prensa escrita, radio, televisión y medios digitales. Lo más interesante tal vez fue que no solo se convocó a medios nacionales, sino que se dio prioridad a medios regionales y rurales, quienes dieron enorme resonancia a la información. Ante lo cual los medios nacionales no pudieron guardar silencio y se logró amplia cobertura desde diversos ángulos y enfoques.

Gavrielatos finalizó agradeciendo el compromiso de las afiliadas latinoamericanas con la campaña y les aseguró una vez más, que la Internacional de la Educación continuará acompañando esta lucha paso a paso por la defensa de una educación pública con calidad para todos y todas.